Recibo
con sorpresa la noticia de que el Banco Central Europeo va a dejar de
emitir billetes de 500 euros. Entiendo que es evidente que andamos
todos cada vez con menos efectivo, y tiramos más de tarjetas, pero
para un tipo como yo, no tengo claro si es una buena o una mala
noticia.
Los
maños hemos sido gente siempre de pagar en efectivo. Es cierto que
la vida cambia, y esa costumbre es cada vez más complicada. Ya es un
inconveniente grande el hecho de que, en España, no se pueda pagar
en efectivo nada mayor de 2.500 euros, al menos para mí, que, cual
si fuera mi admirado Paco Martinez Soria resucitado, alguna vez he
comprado un coche poniendo un fajo de billetes encima de la mesa del
concesionario, y contando dos veces los billetes chupando con
fruición mi dedo pulgar para facilitar la labor, ante la cara de
asco del vendedor. He de reconocer, eso sí, que nunca tuve narices
para ataviarme con alpargatas, faja y boina para la transacción.
Hay
que reconocer que, aunque el común de los mortales no suelan ver
mucho billete de 500 euros, es un instrumento absolutamente
necesario. Imaginen que ya no existen, ¿como van a llevar los Pujol
las ingentes cantidades de dinero que llevaban a Andorra si no hay
billetes de 500¿. ¡si ya lo tenían que hacer en furgonetas!. ¿Como
lo harán a partir de ahora? ¿En trailers?. Creanme si les digo que
no están las carreteras del Principado, ni las propias calles de
Andorra la Vella para andar con trailers de dinero.
Eso
por no hablar de necesidades más absolutamente primarias. Están
lejanos los tiempos en los que la gente del campo de Aragón bajaba a
la Feria de Maquinaria Agrícola de Zaragoza a comprar maquinaria,
pagada por supuesto en efectivo, despues de dedicar un buen rato al
noble arte del regateo. Ahora se hace una transferencia desde el
móvil y listo. Pero imaginen que se estropea la banda magnética de
su tarjeta justo el dia que se agotan sus existencia de Moet Chandon.
O que hemos acabado la ultima botella de Aquilón, me da lo mismo.
¿Cómo vas a reponer existencias si no puedes ir al Club del Gourmet
con mil euros en efectivo?. Imposible.
Y
aun puede haber casos peores: imaginen una casa con dos hijos
adultos. Algo de lo más normal. ¿Me puede explicar el Señor Draghi
como llenar el frigorifico diariamente si hay algún problema con la
tarjeta y hay que hacer la compra? ¿O llenar el deposito del coche?.
¿Y que me dicen de pagar el aperitivo dominical, haya o no misa
previa de por medio, que eso ya es cosa de cada uno?.
Los
franceses ya solucionaron eso hace tiempo, ya hace muchos años que
vi pagar alli en los supermercados con cheque, ante mi absoluta
estufacción. Mi acompañante residente alli me explicó que si en
Francia entregabas un cheque sin fondos la Policia iba a buscarte a
casa a la mañana siguiente. En España el cheque prácticamente no
se utiliza, salvo que sea emitido y garantizado por una Entidad
Bancaria, ya que, cuando se usaban, la probabilidad de que no hubiera
fondos era bastante elevada.
No
obstante, pasa la tarde, y la radio hace publico un teletipo en el
que el Banco Central Europeo comunica que los billetes de quinientos
euros se seguirán produciendo hasta finales del 2.018. Menos mal,
los Pujol y yo, entre otros, podemos dormir tranquilos hasta
entonces.
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